Cuando tienes un hijo en edad escolar, debes estar atento a las señales que indiquen si está siendo víctima de acoso por parte de sus compañeros y/o profesores. En muchos casos, los niños o adolescentes tienen miedo de denunciar a sus acosadores.

El bullying es un problema ampliamente extendido en los centros escolares, pero son muy pocas las denuncias que se hacen. Por tanto, es importante contar con un protocolo que permite su detección tanto por los profesores como los padres.

En este sentido, hay distintas señales y comportamientos que advierten sobre la ocurrencia de acoso escolar, así como algunas preguntas que te ayudan a identificarlo. Conoce un poco más sobre la mejor manera de detectar un caso de bullying.

¿Es lo mismo acoso escolar que bullying?

La traducción del término bullying al español es intimidación, que tiene que ver con infundir miedo o temor a una persona. El acoso está referido a la acción de acosar (perseguir o apremiar a alguien con distintos requerimientos o molestias).

Por tanto, en términos generales, el acoso se utiliza como sinónimo de bullying y el mismo se puede dar en varios ámbitos. Por ejemplo, existe el acoso o bullying laboral, cuando eres perseguido o intimidado en tu sitio de trabajo.

Igualmente, se puede hablar de acoso sexual cuando alguien pretende aprovecharse sexualmente de otra persona cuando está en una posición de superioridad. En el caso particular del acoso escolar, ocurre cuando uno o varios alumnos se dedican a intimidar a un compañero para denigrarlo delante del grupo.

El bullying o acoso escolar incluye tanto hostigamiento como maltrato tanto psicológico como verbal.

De tal manera, que muchos expertos suelen usar bullying y acoso escolar de igual manera, aunque se deben considerar las diferencias particulares entre ambos términos. Así, el acoso escolar o bullying ocurre cuando un alumno se ve expuesto de manera reiterada y por largos períodos, a intimidación o persecución por parte de sus compañeros.

¿Cómo detectar bullying en tu hijo?

El acoso escolar se ha convertido en un problema grave para muchos niños y adolescentes, muchos de los cuales no lo manifiestan. Algunos estudios indican que en España, uno de cada 5 niños en la escuela es víctima del bullying.

 No obstante, muchos guardan silencio sobre este comportamiento, debido a que tienen miedo de las represalias que puedan sufrir. Asimismo, sienten que tendrán un mayor rechazo y aislamiento social, si se atreven a denunciar al agresor.

Se estima que apenas un 15% de los alumnos que son víctimas de bullying se atreven a denunciarlo ante sus padres y/o profesores.

En este sentido, los padres tienen la responsabilidad de estar atentos al cambio de comportamiento de sus hijos. Algunas de las señales que pueden estar indicando que el niño o adolescente es víctima de acoso escolar, son:

• El niño cambia su carácter en el entorno familiar. Este cambio suele presentarse de forma repentina o gradual, como por ejemplo, pasar de una personalidad extrovertida a introvertida.
• Presenta dificultades para conciliar el sueño, se vuelve frecuente que tenga pesadillas o comienza a dormir durante muchas horas.
• Muestra desequilibrios en la alimentación, ya sea que comienza a comer muy poco o lo hace en exceso.
• El rendimiento escolar del niño o adolescente cambia repentinamente y pasa a tener malas calificaciones y descuida sus deberes y responsabilidades en la escuela.
• Muestra rechazo a ir a la escuela o a compartir con sus compañeros de estudio fuera del ámbito escolar.
• Sus pertenencias y materiales escolares presentan daños o deterioro con mucha frecuencia.
• El niño comienza a hacer peticiones inusuales de dinero para ir a la escuela.
• Durante la semana escolar el menor presenta síntomas psicosomáticos como dolores de cabeza, de estómago, mareos, temblores o vómitos, entre otros. Los mismos suelen desaparecer durante el fin de semana y vacaciones escolares.
• Se observan algunas dificultades en el aspecto cognitivo, como pérdida de memoria, de atención o un comportamiento disperso.
• El niño o adolescente presenta signos de violencia física como moretones, rasguños u otros de manera frecuente, dando explicaciones poco convincentes.

Al notar varias de estas señales, es de gran importancia que los padres busquen ayuda especializada para lograr que el niño o adolescente se exprese. Si quieres tener pruebas de que tu hijo es víctima de bullying, puedes contratar los servicios de un detective privado.

Para esto, consulta a los expertos de Doverty, agencia de detectives de amplia experiencia. Sus profesionales te harán las recomendaciones pertinentes sobre la mejor estrategia a seguir, dentro de las normativas legales, para comprobar el acoso escolar.

Preguntas para detectar bullying escolar

Si tienes la sospecha de que tu hijo o alguno de tus alumnos está siendo víctima de bullying en el colegio, puedes realizar una serie de preguntas. Las respuestas a las mismas, te permitirán tener una mejor información y así acudir a los especialistas por ayuda:

• ¿Cómo te sientes con relación a tus compañeros de clase? La intención es comprobar si el estudiante se siente cómodo o percibe algún conflicto.
• ¿Sabes a qué se refieren con el bullying y me puedes dar algún ejemplo? Se pretende concientizar al estudiante del problema y saber si es capaz de reconocerlo.
• ¿Alguna vez has sufrido alguna agresión física y/o verbal por parte de alguno de tus compañeros? Si el cuestionario es confidencial, esto puede permitir que el niño o adolescente haga una denuncia.
• Si has sido intimidado, ¿es frecuente o ha ocurrido en pocas ocasiones? Se busca que el alumno evidencie si sufre agresiones de forma recurrente.
• ¿Alguno de tus compañeros acostumbra a agredir o molestar a los alumnos más pequeños o débiles? Permite al estudiante identificar los agresores más comunes en el entorno escolar.
• ¿Qué crees que piensa y siente un compañero que agrede e intimida a otros? La intención es que el alumno se ponga en el rol del acosador e identifique los sentimientos que pueden provocar su actuación.
• ¿Qué harías si eres víctima de bullying o eres testigo del acoso a un compañero? Se enfrenta al estudiante a las acciones que debe tomar en caso de un comportamiento no adecuado por parte de un acosador.

¿A dónde acudir en caso de bullying escolar?

Cuando un niño o adolescente es víctima de acoso en la escuela, el paso más difícil es contar la situación que está sufriendo. En este sentido, lo más recomendable es que acuda a personas de su confianza para ponerla al tanto de su situación.

Los padres deben estar atentos a las señales de bullying y generar una relación de confianza con los hijos, a fin de que les expresen sus sentimientos. Por su parte, el centro escolar debería contar con los mecanismos que permitan hacer denuncias anónimas, para que la víctima se sienta más confiada y protegida.

Cuando los padres conocen que su hijo está sufriendo acoso escolar, se deben seguir los siguientes pasos:

• Llevar un informe cronológico de las distintas situaciones de acoso y adjuntar al mismo, si los hubiera, constancias médicas de lesiones físicas o evaluaciones psicológicas.
• Pedir por escrito una reunión con el tutor del alumno en el centro escolar. En esta reunión consignar los informes y hacer la solicitud de que se investiguen los hechos.
• Se solicita una segunda reunión, en la cual el centro escolar debe informar sobre las medidas que se toman para evitar el bullying. La institución está obligada a mostrar a los padres o representantes legales del menor, el protocolo de actuación oficial que se debe abrir.
• Hay que concretar una tercera reunión, durante la cual los padres expresan si están satisfechos o no con las medidas tomadas por el centro. Asimismo, sobre las sanciones educativas que se hayan generado.
• Si la situación de acoso escolar se mantiene, se tiene la opción de hacer una denuncia ante los tribunales competentes, sea por vía civil o administrativa.